Estas líneas se entenderán, es el pensamiento de muchos peronistas de Rio Negro los cuales vimos trunco el sueño de ver al “Gringo “gobernando firmemente y con una idea clara de que necesitaba la provincia, en los primeros albores del 2012.

Aunque todavía duela, el pasado hay que dejarlo atrás y debemos mirar al futuro, en esta provincia evidentemente el solo intento de hablar de política desata las reacciones y susceptibilidades de muchos, cuando tendría que ser lo más normal, el cuestionar u objetar medidas del gobierno se transforma inmediatamente en una acción desestabilizadora, cuando tendrían que ser tomadas para corregir el rumbo, dentro del peronismo convergen diferentes ideologías, sectores y afinidades, todos con aspiraciones validas a la hora de ocupar los espacios de poder.

Este 2014 definirá la candidatura a gobernador, entonces cuando vamos a plantear este tema en las Unidades Básicas, en la sociedad? Seguramente se tildaran de irresponsables estas palabras, al contrario me siento responsable pensando en que pasara con el peronismo en los próximos años en Rio Negro, asumiendo que la sociedad ya no elije candidaturas al azar, que ya no compra pescado podrido y que la lupa de su mirada esta sobre cada dirigente.

Yo soy de los que sienten que no se cumplió con lo estipulado por Carlos Soria en su campaña y sus primeros 20 días de gobierno, es un pecado pensarlo?, por supuesto que no, el devenir de los días y la opinión de la gente así lo demuestran, yo soy de los que quiero funcionarios con contracción al trabajo, con hospitales funcionando plenamente, con políticos preocupados por las realidades de cada región y no haciendo internismos baratos que no llevan a ningún lado, yo soy de los que quiero un peronismo de debate, de puertas abiertas, yo soy de los que quiero un gobernador peronista en 2015, está mal pensar así? Claro que no, que no nos hagan creer que nuestras palabras cuando planteamos estos temas están fuera de órbita, cuando las palabras molestan es porque se tocan intereses, cuando las palabras molestan es porque los dirigentes que poco han hecho ven tambalear su frágil continuidad.

Por eso como afiliado peronista, como rionegrino, estoy convencido que a cada dirigente será la sociedad la que lo ponga o saque en algún cargo, no las opiniones de los agoreros de nuestra política.

EMILIANO DEL CARPIO

EX CONCEJAL

SEC. ACCION POLITICA – U.B. ING. JACOBACCI