El parlamentario progresista había enviado en diciembre pasado un pedido de informes debido a la presencia de una mancha aceitosa en el río Negro a la altura de Viedma y Patagones, denunciada por los vecinos.

La AIC respondió que no había recibido denuncia alguna de algo similar a una mancha aceitosa, en forma concreta y oficial. Además afirmó que “lleva adelante Estudios y monitoreos ambientales” y que trabaja “coordinando acciones con los organismos provinciales , con el propósito de controlar la calidad del agua y la del ambiente en su conjunto”; que “opera conjuntamente con una unidad  de Gestión de Calidad del Agua”, evaluando los resultados con los organismos que forman parte (Departamento P. de Aguas, Secretaría de Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable en Río Negro, y sus dependencias afines en Neuquén) e informando permanentemente el estado de calidad de las aguas.

Afirma el organismo que el programa de monitoreo que se encuentra actualmente en ejecución, incluye la determinación de aptitud de los balnearios, monitoreo de agroquímicos, relevamiento de metales pesados, calidad del agua del Nahuel Huapi, entre otros monitoreos.

Por su parte, el legislador quien había tomado la inquietud de los vecinos, consideró “son insuficientes las explicaciones de la AIC y para nada convincentes, aunque no descartó pedir los informes pertinentes a los organismos citados por esta autoridad”.
Odarda coincidió que “la AIC falta a la verdad cuando dice que se realizan monitoreos y que no existe contaminación biológica- química en el río Negro. Siendo esta una atribución del organismo y de la Secretaría de Gestión Ambiental que depende del organismo, se desconocen cuáles han sido los monitoreos  que se mencionan, y los resultados de los mismos. Recorriendo el sitio oficial de la AIC, no ha sido posible hallar estudios sobre calidad del agua”.

“Sería bueno saber qué monitoreos de calidad se han hecho en el Nahuel Huapi, cabecera de cuenca y en los balnearios, por ejemplo de Cipolletti, ya que la AIC afirma que se realizan con su participación, y cuáles son los resultados de los mismos”,  afirmó la senadora.

“Por otro lado, si bien en la respuesta, la AIC se desliga de todo control que deba hacerse sobre industrias o actividades contaminantes, cabe aclarar que tiene una atribución que no ha sido mencionada en su escrito, que es “En caso de rebeldía para adoptar medidas legales tendientes al cese de la contaminación, la Autoridad estará facultada para aplicar sanciones pecuniarias contra el estado signatario en cuya jurisdicción se produzca”, recordó la parlamentaria rionegrina.
En este sentido, Odarda señaló que “se desconoce si ha tenido una acción coercitiva con los Estados parte, de modo de evitar la contaminación que se produce, por ejemplo en los vuelcos de residuos cloacales crudos”.