Un puño apretado, los dos dedos en "V" y una sociedad inquietante

Nota de opinión: Por Nicolás Ariel Abelleira Tapia.

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Un sinfín de miradas derivan de otra elección nacional histórica, que para la tranquilidad    cotidiana  de muchos, ha depositado a Alberto Fernández en la presidencia y a Cristina Fernández, acompañándolo, a mi criterio, una garantía de que la, ahora sí, pesada herencia, no le será facturada al pueblo bajo ninguna circunstancia.


Quienes esperábamos dejar atrás estos 4 años de desidia e irresponsabilidad gubernamental, de improvisaciones permanentes, de malabarismos, de crueldad, de insensibilidad e injusticia social, endeudamiento, ineptitud, torpeza, corrupción, descontrol económico, inflacionario, pobreza, indigencia, tintes de fascismo, etc, etc, etc, celebramos y nos desahogamos tras este triunfo popular, porque sentimos entre tantas cosas, que haber resistido  como lo hicimos, había tenido ahora nuestra recompensa. No era ni más ni menos,  que la única vía por la cual era posible obtenerla, la votación, y así sucedió. Dicho esto y haciendo la valoración correspondiente a la victoria, teniendo en cuenta lo incierto que era hace un tiempo asegurar ganar en primera vuelta, hecho que finalmente se concretó, debo confesar al mismo tiempo que festejo y me alegro, que los porcentuales de votos al momento, son muy dudosos, quizá me equivoque, y quepa el análisis posterior a este comentario que tengo la necesidad de hacer, pero es al menos llamativo. Que 2.300.000  sea el incremento de votantes de CAMBIEMOS y solo alrededor de 250.000 hayan optado por el acompañamiento a los Fernández, de una elección a otra, sinceramente no lo creo. En el medio no hubo nada a lo cual uno le pueda adjudicar este sorprendente aluvión de adhesión al gobierno neoliberal, más allá de los esquiadores mencionados por Carrió, que aparentemente volvieron. Creo sí, que ante la nebulosa  de los amantes de los globos amarillos, es la mejor "foto" que podría haber obtenido el Macrismo, por eso mismo, me permito decir, que quizá se haya acudido a esas malas artes que no pudieron llevar a cabo en las PASO, porque la advertencia previa había sido significativa, y las hayan implementado ahora, en las generales.

Dándole también, cierto margen de credibilidad y aceptación a lo sucedido, porque también corresponde, ante la inexistencia de pruebas concretas a la sospecha que de a poco se va levantando y sin que desaparezcan mis interrogantes respecto a los votos acumulados por unos y otros, entregándonos a una “supuesta realidad electoral”, es ahí en donde los interrogantes y el alerta van en ascenso.

De tener veracidad estos números, estamos hablando de una preocupación mayúscula que debiéramos tener ante la postura de una parte de la sociedad, más de 10 millones de personas, que fueron detrás de quienes castigaron a la gente. Mucho más asombro despierta la situación, si consideramos que muchos de los mismos que se inclinaron por Macri- Pichetto, fueron receptores del rebenque del multimillonario y  de su aliado,  cómplice de todas y cada una de las “políticas” y /o “marketineadas”, perpetradas por quien pelea el primer puesto en cuanto al peor presidente democrático de la historia, perdido y en retirada, el camaleón Miguel.

Focalizo mi atención en este 40% de la población que desmitifica “el cartel” del cual muchas veces nos hemos sentido orgullosos, que bajo la premisa de que “El Argentino es solidario”, nos ubicaba como una sociedad, a pesar de todo, con límites ante la desgracia ajena; estos 10 millones y pico de personas que llevan a juicio esa virtud, apuñalando el corazón del pueblo, abren además una nueva página que pareciera interminable, esa que Alberto Fernández sobradamente ha demostrado querer dejar atrás, esa de los “dos países en uno sólo” llamémosla, para no recurrir al trillado calificativo con el cual muchos periodistas de la CABA, se han vendido al mejor postor durante tantos años para poder tener vigencia.

Siento, realmente por lo observado, por lo expresado, en fin por lo vomitado por parte de los perdedores, funcionarios y simpatizantes de Cambiemos o simplemente antiperonistas, que la nueva hoja que queremos escribir será muy difícil, no imposible, no claudicaremos, pero también digo que la agresión, el odio y resentimiento, que se nos ha transmitido quienes serán oposición desde el 10 de Diciembre y de sus adeptos, le bajan el copete a la gran apuesta que propone Alberto, a la cual creo que tendremos que ser inteligentes para apuntalarla y no echarla por tierra, pero ver lo exacerbado de los comentarios en redes sociales por parte de conocidos, “amigos” y hasta familiares, son lamentablemente muy frustrantes ante la idea primaria que es la de acercar a la comunidad toda, lo mismo en medios de comunicación como la televisión y las radios, un enojo, una violencia propia del sinsentido.

Ahora bien y para finalizar, quiero decir también al mismo tiempo que rezongo de esta situación indeseable que, si la quieren así, se van a topar con que  acá hay convicciones, acá hay firmeza, acá hay realidades irrefutables que a más de 12 millones de tipos y tipas,  no nos dan lo mismo, y ante lo obtuso y cerrado, no tengan duda que con el correr del tiempo, esa terquedad quedará en segundo plano y seguiremos militando y ampliando la idea de un país justo para todas y todos, más allá del pataleo caprichoso de quien sea. 

NICOLAS ARIEL ABELLEIRA TAPIA

32049598

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