Bloque de legisladores del Frente de Todos
Tal como lo expresáramos en
la pasada sesión legislativa del 17 de noviembre los legisladores y
legisladoras del Frente de Todos, reiteramos nuestro rechazo al proyecto de Ley
1317 de modificación del Fondo Provincial de la Energía Eléctrica impulsado por
Juntos Somos Río Negro, que crea un nuevo cargo equivalente al 5% en las
facturas residenciales, comerciales e industriales de electricidad en Río
Negro.
De acuerdo a la nueva norma
aprobada por el Frente Renovador, el Frente Grande y el legislador Luis Noale,
junto al oficialismo, dicho sobrecargo estaría destinado a la creación de un
fondo específico para la realización de obras de infraestructura previstas por
el Plan Director Eléctrico diseñado por la secretaría de Energía.
Vemos con profunda
preocupación la falta de previsión de un Gobierno provincial que hace más de
una década administra la provincia, pero recién ahora advierte que la
situación, en cuanto a la provisión de energía eléctrica en Río Negro es
crítica y que hay que hacer obras urgentes que deberán pagar las y los
rionegrinos.
Que nuestros pequeños y
medianos empresarios, que nuestros comerciantes, que nuestros usuarios
residenciales sepan que se trata de un nuevo impuesto encubierto, creado en un
contexto de grave crisis social e incertidumbre en el país.
Y del mismo modo, las
inexistentes gestiones del Gobierno de la provincia para obtener, a lo largo de
los años, un financiamiento alternativo para evitar la crisis de
infraestructura en la provincia y no recurrentemente de los bolsillos de los
trabajadores rionegrinos.
La improvisación y el apuro
con que fue redactado este proyecto de Ley resultan alarmantes.
Carece de previsiones y de
parámetros. Entre otras cuestiones, por ejemplo, no se sabe durante cuánto
tiempo los rionegrinos deberemos continuar pagando este nuevo tributo ni sabemos
a ciencia cierta cuánto se recaudará.
No hay un cronograma ni un
detalle técnico sobre las obras que la provincia necesita y de las que sólo se
conoce que tendrán, en conjunto, un costo final de 100 millones de dólares.
En total, bajo el maquillaje
de un proyecto técnico, no se trata más que de un nuevo manotazo al bolsillo.
De un cheque en blanco que el oficialismo y sus adherentes le han firmado a la
nueva administración que asumirá el 10 de diciembre.
La Cámara de Comercio,
Industria y Producción de Villa Regina, la Federación de Entidades Empresarias
de Río Negro, la Cámara de Agricultura, Industria y Comercio de General Roca,
la Asociación de Productores del Alto Valle entre otras instituciones y productores
independientes, expresaron también su rechazo y coincidieron en que
inevitablemente se corre el riesgo de que el nuevo tributo creado por el
Gobierno provincial se traslade a los precios de productos y servicios.
Se trata de una Ley
exclusivamente tributarista y poco seria, impuesta en un momento en el que
resulta irresponsable cargar sobre las espaldas de rionegrinos y rionegrinas un
nuevo gravamen que más que a la infraestructura eléctrica irá a tratar de
salvar la imprevisión y la falta de gestión del Gobierno.
16 noviembre 2024
Opinion