La Cámara Segunda del Trabajo de Bariloche resolvió a favor de una empleada
despedida de una empresa de comunicaciones local, tras ser acusada de presentar
licencias médicas falsas. La trabajadora, que se desempeñaba en tareas de
maestranza, había sido desvinculada de la compañía después de que la empresa
desestimara la validez de los certificados médicos que presentó para justificar
sus ausencias laborales.
La mujer había comenzado a trabajar en la empresa en 2018 y, a partir de
2021, sufrió una vivencia traumática que afectó su salud. Ante ello, presentó
una serie de certificados médicos que indicaban su incapacidad para trabajar en
solitario, lo que motivó la extensión de su licencia por parte de su médico. No
obstante, la empresa alegó que dichos documentos eran falsificados y procedió a
su despido.
Frente a esta situación, la trabajadora llevó el caso a la justicia laboral
de Río Negro, presentando informes de pericias médicas y su historia clínica
para probar la autenticidad de los certificados. Tras analizar las pruebas, el
tribunal concluyó que los documentos presentados por la empleada eran
legítimos, lo que llevó a la condena de la empresa a abonar diversas
indemnizaciones, incluyendo diferencias salariales y otros conceptos laborales.
La Cámara del Trabajo destacó que la empresa no había contestado la demanda
en tiempo y forma, lo que permitió que se consideraran ciertos los hechos
denunciados por la trabajadora. Además, el tribunal subrayó que los
certificados médicos y la historia clínica de la empleada no fueron impugnados
por la empresa, lo que sustentó aún más su validez.
En su fallo, la Cámara determinó que el despido de la trabajadora carecía de
fundamento legal y ordenó a la empresa abonar indemnizaciones correspondientes
por antigüedad, preaviso, integración del mes de despido, y diferencias
salariales. También se aplicaron multas por no entregar el certificado del
artículo 80 de la Ley de Contrato de Trabajo y por obligar a la trabajadora a
iniciar acciones judiciales para cobrar lo adeudado.
Finalmente, el tribunal intimó a la empresa a entregar las certificaciones
de aportes y servicios de la trabajadora en un plazo determinado, bajo el
apercibimiento de aplicar una multa diaria en caso de incumplimiento.
12 diciembre 2024
Judiciales