Al cumplirse 31 años del atentado contra la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA), el vicegobernador de Río Negro, Pedro Pesatti, ratificó el compromiso del gobierno provincial con los principios de memoria, verdad y justicia, y advirtió sobre la persistencia de la impunidad como una forma de violencia que afecta a las víctimas y a la sociedad en su conjunto.

Pesatti recordó que el ataque perpetrado el 18 de julio de 1994 provocó la muerte de 85 personas y dejó más de 300 personas heridas, constituyéndose como uno de los hechos más graves en la historia argentina reciente. En ese sentido, sostuvo que la falta de resolución judicial del caso continúa siendo una deuda pendiente del sistema judicial con las víctimas y sus familias.

Durante su mensaje conmemorativo, el vicegobernador hizo referencia a las causas ideológicas que motivaron el atentado, señalando que el antisemitismo fue el motor de un acto basado en la deshumanización y el odio. En línea con el fallo de 2024 que calificó al atentado como crimen de lesa humanidad, Pesatti remarcó la responsabilidad adjudicada al gobierno de Irán y a la organización Hezbollah, e indicó que cualquier relación con ese país debería quedar supeditada a una reparación integral del daño ocasionado.

“La autoría del gobierno de Irán y de Hezbollah como responsables directos ha sido determinada por la Justicia”, afirmó. “No se puede construir una memoria honesta si no se nombra a los culpables con todas las letras”, agregó. A su vez, consideró que rechazar cualquier forma de odio constituye una obligación ética y democrática.

En su intervención, el vicegobernador también expresó su reconocimiento a familiares y personas sobrevivientes, a quienes definió como actores fundamentales en el sostenimiento del reclamo de justicia. “A pesar del dolor, siguen reclamando con dignidad. Ellos nos enseñan que la memoria es un acto de coraje colectivo”, afirmó.

Finalmente, Pesatti advirtió sobre el riesgo de reducir la conmemoración a una instancia simbólica sin consecuencias institucionales y sostuvo que recordar el atentado a la AMIA implica defender los valores democráticos frente al terrorismo y a cualquier forma de encubrimiento o complicidad. “Sin justicia, no hay república posible”, concluyó.