La situación en la planta de Alcalis de la Patagonia sumó un nuevo capítulo de tensión gremial y social tras conocerse el envío de 41 telegramas de despido a trabajadores en plena negociación salarial. Desde la Federación de Sindicatos de Trabajadores de Industrias Químicas y Petroquímicas de la República Argentina (FESTIQyPRA) repudiaron la medida y calificaron la actitud empresaria como un acto de “más leña al fuego” contra el gremio y sus afiliados.
El secretario adjunto de la Federación, Pedro Gómez, expresó su preocupación por la gravedad de la situación en San Antonio Oeste y advirtió que los cesanteados son jefes de familia con años de trayectoria laboral en la compañía. “Acompañamos la representación del Sindicato Químico de la Patagonia que conducen Carlos y Silvia Carrizo. No reconocemos esta ‘baja de línea’ de despidos en un momento tan delicado para los trabajadores. Este accionar demuestra que la empresa solo busca quebrar al gremio”, sostuvo.
Según explicó Gómez, la medida había sido denunciada en la Secretaría de Trabajo de San Antonio Oeste, donde los dirigentes ratificaron su decisión de sostener la protesta hasta lograr una respuesta favorable. “Se están enviando telegramas sin causa, en un claro acto de persecución sindical”, remarcaron.
El dirigente recordó además que la Federación ya había convocado a todas las organizaciones sindicales del país a expresar su solidaridad. “No vamos a dejar solos a los compañeros de ALPAT. Si es necesario, vamos a coordinar medidas de acción directa en todo el país”, afirmó.
La FESTIQyPRA también reclamó al Gobierno nacional y provincial que intervengan en el conflicto. “El Ministerio de Trabajo de Río Negro debe dictar medidas obligatorias de conciliación y garantizar la paz social. Urgimos a reforzar las inspecciones y el control sobre las condiciones laborales en la planta”, plantearon.
En el plano social, Gómez advirtió que la situación genera un fuerte impacto en San Antonio Oeste y la región. “Estamos hablando de 41 familias que se quedan sin sustento en un contexto de crisis nacional. Es una provocación inadmisible que pone en riesgo la paz social en la zona”, dijo.
ALPAT es la única productora de carbonato de sodio en Sudamérica y su actividad es considerada estratégica para la economía nacional. Sin embargo, según denunciaron los gremios, la empresa “pretende avanzar con un ajuste a costa de los trabajadores”.
“Ya sabemos lo que fue la década del 90 con la privatización de empresas estatales. No vamos a permitir que se repita la misma historia con ALPAT. Defenderemos cada puesto de trabajo y cada derecho adquirido”, advirtió Gómez.
Finalmente, desde la Federación llamaron a la comunidad de San Antonio Oeste y de toda la provincia a acompañar el reclamo de los trabajadores. “Esto no es solo una lucha gremial: es una lucha por la dignidad de toda la clase trabajadora. No vamos a claudicar hasta que se restituyan los puestos de trabajo y se garantice el respeto a los derechos sindicales”, concluyeron.

5 diciembre 2025
Gremiales