Si bien las dotaciones del cuartel de Bomberos Voluntarios lograron controlar el siniestro en pocos minutos, la temperatura alcanzada por el fuego fue tal que hasta se derritieron elementos plásticos de otros rodados, que no fueron directamente alcanzados por el foco ígneo.
Sobre el techo de un Fiat 147 se observaban rastros de lo que, se presume, fue un acto intencional para provocar que ardiesen los vehículos, que estaban en estado de abandono. Sin embargo, la Policía no oficializó la hipótesis de un atentado de vandalismo, a la espera de los resultados de las pericias de Bomberos.
La parte principal del edificio, donde se encuentran las oficinas y el bloque de celdas, no fueron afectadas por las llamas.
El incendio fue descubierto aproximadamente a las 20.15, tras una explosión que llamó la atención del personal de guardia y, en principio, hubo temor porque el siniestro fuese dentro de la comisaría.
Lindante al predio policial hay un baldío y es habitual la presencia de menores y adolescentes, que en la mayoría de los casos juegan al fútbol. De hecho, a salvo de las llamas anoche quedó una pelota que traspasó el muro y nadie fue a reclamar.
FUENTE: La Mañana de Cipolletti
15 enero 2025
Judiciales