Por ello, el ejecutivo provincial promovió la ley de ampliación del Superior Tribunal de Justicia, que pasó de tener tres miembros a cinco, con una integración mixta. Mucho se debatió al momento de la aprobación de la ley acerca de esta ampliación, sin embargo, hoy resulta indiscutible que se ha pluralizado el Superior Tribunal, se ha dinamizado su funcionamiento y que esta nueva conformación representa un aporte a la democratización del sistema.
Este proceso de cambio alcanzó también al Ministerio Público de la Provincia, y el Consejo de la Magistratura, presidido por el Gobernador Alberto Weretilneck, eligió en el año 2013 una nueva Procuradora General, cuya designación completó el proceso de renovación total de la conducción del Poder Judicial en Río Negro.
Considerando los cinco miembros del Superior Tribunal y la Procuración General observamos un equilibrio regional (las cuatro circunscripciones están representadas), una paridad en la representación de género (de los seis cargos tres están ejercidos por mujeres y tres por hombres), y una variada conformación en relación con las especialidades, lo que contribuye a lograr una alta calidad en las sentencias.
En forma simultánea a las designaciones superiores, la Provincia puso en marcha los mecanismos constitucionales para la designación de funcionarios judiciales en todo el territorio, con el fin de revertir la situación de vacantes históricas en los juzgados, lo que producía una acumulación de causas y una sobrecarga en los organismos.
En el lapso de dos años, el Consejo de la Magistratura designó 100 funcionarios judiciales, entre jueces, defensores, fiscales y secretarios, lo que significó una apertura y una renovación, dado que ingresaron abogados de la matrícula y también se promovieron agentes que ya venían ejerciendo funciones dentro del Poder Judicial. Por años, durante los gobiernos radicales, el sistema permaneció cerrado; prueba de ello es que en el año 2008, por ejemplo, no se designó ningún funcionario, y en el año 2010 sólo se designó a uno. Esta situación significó que el órgano del Consejo de la Magistratura permaneció cerrado y que la movilidad dentro del sistema se producía, a través de las subrogancias, en forma arbitraria, al margen de los mecanismos democráticos. Asimismo, las vacantes en cargos decisorios claves, como las de la Cámara Penal de Viedma, por ejemplo, detuvieron el sistema judicial casi por completo, en temas fundamentales, como las investigación de los delitos contra el Estado.
El Consejo de la Magistratura también reactivó los sumarios que investigan la conducta de los funcionarios judiciales revirtiendo la sensación de inimputabilidad de los jueces. Así, el año pasado, se produjo la destitución de un Camarista Penal, a través de los mecanismos previstos por la ley
Concursos resueltos
Vale la pena analizar las estadísticas elaboradas por el equipo técnico del Consejo, dado que evidencian el dinamismo que se produjo en estos últimos dos años.
Estadísticas Claras
Este crecimiento en el número de concursos tomados y en el número de designaciones de observa claramente en el cuadro de barras arriba.
Para el año 2014 existe un importante número de concursos llamados, en diferentes etapas de definición, por lo que se espera que se siga incrementando el número de designaciones.
También está en agenda la rediscusión de los mecanismos de designación de los funcionarios judiciales con el fin de mejorar la celeridad del proceso, la transparencia del sistema y la publicidad de los actos vinculados a este organismo.
Sin duda, estos cambios profundos redundarán en beneficio de la sociedad en su conjunto que demanda de la justicia una respuesta ágil, pertinente y de calidad.
* Miembro Titular del Consejo de la Magistratura de Río Negro
Prensa: Legisladora del FpV, Arabela Carreras.
16 noviembre 2024
Opinion