La falta de agua provocó la suspensión de clases en escuelas, así como situaciones extremas en barrios donde no había el caudal básico de consumo e higiene. En ese mismo momento, la Senadora Nacional del Frente Progresista, Magdalena Odarda junto a Cristian Llanca (Pte. ARI Sierra Grande), se presentaron ante el Juez como amparistas por “falta de agua”, un derecho humano irrenunciable, al que hoy no todos acceden. El amparo fue rechazado por considerarse que las obras “ya se estaban licitando”. Unos meses después, el tiempo le daría la razón a los amparistas.
La población serrana ha vivido un verano muy intenso; tras el incendio desatado en cercanías de Playas Doradas a mediados de enero, sumado a los cortes intermitentes de luz que se registran periódicamente y que afectan a la población en su conjunto. En este caso, el conflicto de abastecimiento de agua, no solo alcanzó a vecinos del pueblo o prestadores de servicios del balneario, ahora también se ve afectada la principal fuente de trabajo: la actividad minera se encuentra paralizada.
Días atrás la Minera MCC amenazó con la suspensión del 75% del personal de trabajo -unos 450 operarios- si no recuperan el caudal mínimo y necesario para sus actividades de producción y transporte de hierro. Sería dramático que el motor de la economía regional se viera afectado de manera significativa.
Exigimos al gobierno provincial que se adopten las medidas necesarias para evitar que sean los trabajadores mineros quienes terminen siendo los más perjudicados, ya que ellos no tienen la culpa de haber llegado a esta situación límite.
Consideramos esta situación como una falta de respeto a todos los vecinos de la localidad de Sierra Grande. No puede ser posible que sean víctimas de la dejadez e inoperancia de un gobierno que los ha dejado en situación de riesgo, sin hacer nada al respecto durante 9 meses, y que ahora se ve obligado a reaccionar, pretendiendo calmar los ánimos repartiendo tanques de agua a familias damnificadas y planificando a último momento una recorrida por el lugar donde debieran estar las obras que nunca se hicieron.
Esta reacción gubernamental surge a partir de que se decide cortar la ruta y poner en evidencia a un Gobierno que ni siquiera puede emular eficiencia, con petromillones salvadores que tienen a Sierra Grande en los caminos, al Alto Valle postrado, en punto de ebullición y con la fruta en las plantas, a los hospitales de toda la provincia colapsados y una interminable lista de realidades que duelen, indignan y que vemos a diario en cada lugar, siempre.
Sabemos que el ejecutivo provincial tiene los fondos necesarios para hacer la obra, es necesario que en este sentido, se acelere al máximo en la reparación del Acueducto Ventana, colocando todos los esfuerzos allí. Ahora exigimos que el Sr. Gobernador Alberto Weretilneck tenga la firme voluntad política de llevar la acción adelante, el pueblo de Sierra Grande no puede esperar más.
Rechazamos los ataques sufridos por la Senadora Nacional Magdalena Odarda, provenientes de vecinos intolerantes, cuando ella se encontraba participando de una asamblea realizada por los propios ciudadanos, escuchando y proponiendo acciones para colaborar en busca de una solución, fiel a su estilo que la caracterizo siempre, peleando codo a codo con vecinos, asambleas y organizaciones.
Queremos expresar nuestra solidaridad con el pueblo serrano que está en pie de lucha en la ruta nacional Nº 3, con cortes pacíficos al reclamo de una solución urgente al conflicto, con asambleas populares mediante. Como jóvenes progresistas volvemos a levantar nuestro lema favorito: “sin agua no hay futuro”.
Juventud CC-ARI
Río Negro
16 noviembre 2024
Opinion