El
Ministerio Público Fiscal formuló cargos contra una empleada judicial de la
provincia de Río Negro, acusada de utilizar un certificado médico adulterado
para justificar una licencia mayor a la otorgada. Según la investigación, la
acusada agregó días adicionales al documento original, generando un perjuicio a
la administración pública.
El hecho
habría ocurrido entre el 5 y el 26 de diciembre del año pasado. De acuerdo con
la acusación, la empleada modificó el certificado expedido por una profesional
de la salud, agregando el número 1 delante del 7, lo que le permitió sumar diez
días de licencia no prescriptos. El documento alterado fue enviado a través de
los canales oficiales de la institución para justificar su ausencia laboral.
Durante
la audiencia, el fiscal del caso presentó las pruebas obtenidas, incluyendo
informes de análisis técnicos elaborados por la Oficina de Investigaciones en
Tecnología (OITEL), los cuales permitieron recuperar mensajes entre la agente
judicial y personal administrativo, donde se habría registrado la presentación
del certificado adulterado.
Asimismo,
se incorporó un informe contable del Ministerio Público que detalla el
perjuicio económico causado, además del testimonio de la profesional de la
salud que emitió el certificado original y los registros administrativos
vinculados a la solicitud de licencias.
La
defensa pública penal que asistió a la imputada no formuló objeciones a la
acusación, al considerar que se cumplían los requisitos legales. Durante la
audiencia, la mujer hizo uso de su derecho a declarar.
El juez
de Garantías dio por formulados los cargos por los delitos de uso de certificado
falso y fraude a la administración pública, conforme a los artículos 45, 54,
296 en función del 292 y 174 inciso 5 del Código Penal.
En
paralelo a la investigación penal, la Procuración General dispuso la
realización de actuaciones administrativas para determinar posibles sanciones
en el ámbito laboral.
21 marzo 2025
Judiciales