Guardia Mitre comenzó a dar sus primeros pasos hacia un desafío inédito: transformar un campo de tulipanes en símbolo de producción y turismo para la región. La iniciativa, presentada esta semana, busca consolidarse como un nuevo atractivo de la provincia, diversificando la oferta turística de Río Negro con una propuesta sin antecedentes.
El proyecto tiene como protagonistas a Sergio “Flecha” Pérez y Claudio Naim Pérez, quienes decidieron apostar a la estancia Peumayén para plantar cerca de 5.000 bulbos en tonalidades rojo, amarillo, blanco, naranja y violeta. La experiencia, inspirada en el exitoso modelo de Trevelin, busca imprimirle un sello propio que convierta al lugar en un destino imperdible de la Patagonia norte.
“Con Claudio veníamos hablando hace tiempo y ya habíamos hecho ensayos en Roca y en Las Grutas. Pero cuando llegamos acá sentimos que la tierra nos estaba esperando”, contó Flecha, quien se formó en la escuela agrotécnica de Trevelin y trabajó en sus reconocidos campos de tulipanes. Según explicó, el suelo de Guardia Mitre presenta las condiciones de pH y acidez ideales para el desarrollo de estas flores.
El primer ensayo incluyó 4.000 bulbos traídos de Trevelin, entre ellos la variedad “Queen of the Night”, un tulipán negro de gran valor simbólico. El éxito de la prueba abrió la puerta a una proyección mayor: el próximo año se prevé alcanzar una hectárea de cultivo y, en un plazo de cinco años, superar las tres.
La iniciativa no se limita a la producción floral. Sus impulsores proyectan un espacio turístico integral, con un canal navegable para bicicletas acuáticas, un túnel vegetal y propuestas gastronómicas y culturales que sumen atractivos al circuito regional. “Esto no es solo producción. Es turismo sustentable, es trabajo para la gente de Guardia Mitre, es abrir una puerta a la belleza y al futuro”, destacaron.
El modelo combina tres ejes: la venta de bulbos, la comercialización de flores frescas y el turismo de flores. En otros destinos como Trevelin, esta actividad convoca cada primavera a miles de visitantes de todo el país y el extranjero. La expectativa es que Guardia Mitre pueda replicar y adaptar esa experiencia, generando empleo y nuevas oportunidades para la comunidad.
“Esto es apenas una maqueta, una primera chispa. El año que viene, cuando florezcan, Guardia Mitre va a descubrir un paisaje nuevo. Y lo más importante: va a dar trabajo, va a darle futuro a muchas familias”, aseguraron los emprendedores.
Con los primeros tulipanes ya florecidos en la estancia Peumayén, Guardia Mitre comienza a perfilarse como un nuevo destino turístico de la provincia. Entre colores intensos y sueños compartidos, el valle rionegrino se prepara para recibir a visitantes que, en las próximas temporadas, encontrarán en los tulipanes un motivo más para recorrer la región.

5 diciembre 2025
Río Negro