El hecho se produjo el 20 de Julio de este año cuando un Fiat Siena plateado conducido por un joven domiciliado en Viedma embistió cerca de las 20 horas a Lucio Romero, provocando la muerte en la mañana siguiente.
“Pachano” Romero comentó que “la bicicleta donde iba mi hijo tenía todo lo reglamentado y por culpa de un imprudente está muerto. Se podría haber evitado. Yo a mi hijo lo perdí, tenía 22 años, le estaba enseñando un oficio en la obra. Por lo que vi esa noche del accidente en el Hospital, a la madre no se le movía un pelo, el pendejo estaba ahí y cuando yo vi que mi hijo se complico, le pregunte que pasó y me respondió que se le había cruzado, pero me lo dijo de manera cínica.”
El ex presidente de la comisión de fomento de Villa del Carmen señaló que “si yo tengo que definir cómo reaccionar, voy y lo mato. Porque me sacó a mi hijo. Si vos vas a 40 a 50 kilómetros, no clavas el auto como lo hizo. Frenó casi 10 o 15 metros, lo levantó por el aire y la bicicleta quedó abajo del puente. Calculen la velocidad que venía el auto. Mi hijo no era un pibe malo. Viene este hijo de puta a 100 kilómetros por hora y te lo mata como un perro.”
Con respecto a las horas pasadas en el Hospital Pedro Ecay el dirigente barrial dijo que”ojala que el equipo nuevo de salud pueda volver a las fuentes, de decir se recibieron de médicos y practican lo que le enseñaron, respetando a la vida, al ser humano. Esa noche el Hospital estaba re sucio, lleno de tierra, mi hijo en terapia intensiva, seguramente con las defensas bajas y los médicos entraban y salían. Para ir a verlo a terapia te tenías que lavar las manos, una cosa que no lo puedo entender. Esa noche pasaron muchas cosas, yo no digo que mi hijo se iba a salvar, estaba muy estropeado, destrozado y estuvo 14 horas agonizando. Pero ojala que se revierta el tema de la salud en Patagones porque un portero no puede manejar estas cosas, es lo mismo que un albañil se quiera meter en plomería o pintura. La salud es otra cosa, ojala podamos mejorar. Está bien que quieran ganar mejor pero también tienen que traer un tomógrafo, porque esa noche lo necesitábamos y tener de residente a un cirujano que se dedique a ese tipo de operaciones, tuvo que venir de Bahía Blanca porque no hay en Viedma y Patagones. Se perdieron casi 5 horas esperando al cirujano. Tendríamos que empezar por ahí.”
Por último Romero quiso agradecer a toda la comunidad porque “yo no pensé que me iba a acompañar tanta gente. Ahora me voy a fortalecer y voy a emprender un proyecto juvenil y voy a sacar los pibes del barrio en nombre de mi hijo. Los pibes se esta envenenandos y todos miran para el costado, nadie dice lo que pasa. Acá ya no hay códigos.”