El padre de dos de las tres víctimas del aberrante crimen de 1997 abandonó ayer los programas de lucha contra la impunidad haciendo pública una breve carta. Y si bien no hizo alusiones directas a la absolución del magistrado que investigó el caso sin hallar a los culpables, mencionó hastío. Y, otro gesto que podría relacionar la decisión con el desenlace del sumario a Iribarren es que continuará vinculado al programa anti impunidad de Neuquén.
En el texto difundido ayer, expresó: “Cansado por varios años de lucha sin cobrar ningún tipo de retribución tal cual decidí al aceptar la gestión en el año 2006, estimo que llegó el momento de dar un paso al costado”.
Y sentenció en torno a las causas de la dimisión: “Me cansó la indiferencia, las componendas políticas y las mentiras. Agradezco a los pocos funcionarios que brindaron su apoyo y a los familiares que pusieron el hombro a la desigual lucha. A ellos, mi agradecimiento sincero”.

Gestiones

González ya había manifestado su sensación de cansancio respecto de las pocas respuestas a muchos reclamos que desde el Programa, o a través de la agrupación Familiares del Dolor, realizaban a la Justicia. Sin embargo, hasta hace algunas semanas encabezó actividades y gestiones por esas instituciones ante el Consejo de la Magistratura.
En una visita de legisladores, González fue uno de los miembros de Familiares que les comentó las tareas que realiza la institución. Y exigió la continuidad de Oscar Meilán al frente del programa anti impunidad en Río Negro, además de la conformación de la comisión interpoderes nunca implementada.