Se le imputó haber dispuesto de personal con viáticos y movilidad judicial con pago de gastos para mudar desde Buenos Aires a Viedma elementos particulares como libros, bicicletas y una heladera, entre otros objetos, mientras ejercía la presidencia del Poder Judicial de Río Negro.

Además habría utilizado la movilidad oficial para trasladar a su familia durante el receso invernal a la Capital Federal. En esa misma fecha Sodero Nievas también cobró viáticos además de un pasaje aéreo por una comisión de servicios a Buenos Aires para participar de una reunión en el Ministerio de Justicia de la Nación. Todo ocurrió en julio del 2001.

Se le reprochó además que para autorizar esa comisión de servicios habría fundamentado un motivo falso que permitió el cobro de viáticos del chofer que se encargó de la mudanza y los traslados. El uso de personal y movilidad judicial para trámites particulares está prohibido para todos, incluidos los magistrados.

El martes pasado, Sodero Nievas concurrió a Tribunales citado por el juez penal Favio Igoldi para declarar en calidad de indagado en esta causa. Por prescripción médica el exvocal del STJ se abstuvo de declarar pero igual comenzó a correr el plazo de 10 días para que el juez resolviera su situación procesal, pero el magistrado dictaminó antes que venciera ese margen.

La defensa de Sodero Nievas cuestionó que la citación a indagatoria se haya formulado en el marco de una reconstrucción del expediente, interpretando que la documentación se habría extraviado en el juzgado. En la resolución el juez Igoldi destacó que el expediente no había sido ubicado en la caja de reserva que correspondía pero que luego fue encontrado el trámite principal.

En esta causa el expresidente del STJ fue sobreseído al inicio de la investigación por el entonces juez penal de Instrucción Jorge Bustamante, resolución que fue apelada por la fiscal Daniela Zágari.

La Cámara hizo lugar a este planteo y el expediente continuó siendo investigado por el juez Juan Bernardi, quien pidió a la Legislatura el juicio político contra el entonces integrante del máximo órgano judicial de la provincia para lograr su desafuero y poder citarlo a declarar en indagatoria. Los legisladores no hicieron lugar y el expediente quedó en reserva hasta que Sodero Nievas dejó su función de juez –a principios de este año– quedando sin la protección de los fueros. En realidad este beneficio lo que impide es la privación de la libertad de quien lo detenta pero si son citados a declarar y no concurren no se los puede obligar a comparecer con el uso de la fuerza pública porque significaría afectarles la libertad ambulatoria.

FUENTE: Diario Río Negro