El empleado policial dependiente de la Unidad Nº 30º fue –según indicaron los investigadores policiales-  es sospechoso de pedir dinero a cambio de la devolución de los elementos secuestrados  que eran parte de los inventarios de las investigaciones judiciales y/o policiales.
A partir de tomar conocimiento de este hecho repudiable el Comando Superior actuó de manera inmediata dando intervención al Juzgado de Instrucción Nº 4 a cargo del Doctor Guillermo Bustamante.
El jefe de Policía Jorge Uribe fue taxativo con respecto a la política de ejercicio y  desempeño del accionar del personal y contempló que “bajo ninguna circunstancia permitirá que ningún par sea sospechado siquiera de algún ilícito y ante menor conducta irregular será suspendido y separado de sus funciones, sancionado o en última instancia dejará de pertenecer a la fuerza”.
El policía en cuestión fue  puesto a disposición de la justicia en una clara muestra de celeridad en el acto administrativo llevado a cabo por la Jefatura de Policía de Río Negro.
La situación de irregularidad en el accionar de ese efectivo policial en juridisdicción de la Regional I pone en evidencia que el Comando Superior y los Jefes Policiales serán insobornables ante los hechos de corrupción que se pudieran dar dentro de la Institución.
Las actuaciones realizadas pretenden ser  muestra acabada de honestidad y responsabilidad de  Policía de Río Negro en el trabajo diario de prevención del delito, para evitar la carga ante la sociedad de este tipo de hechos que generan vergüenza y repudio generalizado.

FUENTE: Policía de Río Negro