Los dueños habían estacionado ambos rodados en el descenso náutico ubicado en la denominada ‘Primera Bajada’ de esta localidad, para posteriormente partir con un gomón hacia la zona de islas situadas río arriba.
Pero no imaginaron que la marea iba a ser de tal magnitud y que si no hubiese sido por la acción de varios vecinos los vehículos iban a ser arrastrados por el río.
Si bien la tarde estaba desapacible, fueron muchas las personas que aprovecharon para pasear por la costanera maragata. Uno de ellos advirtió la situación y dio a aviso a la policía y a otras fuerzas de seguridad, como bomberos y Prefectura.
No obstante, todos se veían en la imposibilidad de quitar las camionetas de allí al no contar con las llaves. Una de ellas pudo ser abierta, pero tenía la dirección trabada y se encontraba en un área inclinada que dificultaba el acceso a otros rodados para ‘tirarla’. Apenas pudo ser movida unos centímetros ‘a mano’ por los curiosos que se habían acercado.
El otro vehículo (una Eco Sport) se encontraba una posición más cómoda, por lo que otra camioneta la arrastró hacia la calle, cuando estaba a punto de ser llevada por las aguas.
Personal de Prefectura buscó y encontró a los dueños en las islas, luego de lo cual pudieron rescatarse los dos rodados.
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Sudestada y marea alta: por poco se los lleva el río
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