Pesatti concurrió al concierto invitado por la institución israelí en representación del gobernador Alberto Weretilneck, y presenció el evento desde el palco oficial acompañado por el presidente de la DAIA, Ariel Cohen Sabban, quien manifestó la satisfacción de recibir la compañía del vicegobernador rionegrino.
La DAIA propuso, a doscientos años de la declaración de 1816, este emblemático concierto como una forma de poner en relieve a la esperanza como símbolo de la humanidad y de la resistencia ante la adversidad. Representantes de los gobiernos provinciales de todo el país acudieron al evento cultural
“Compartir una obra universal como la Novena Sinfonía de Beethoven, un verdadero emblema de la humanidad, en un ámbito como el Teatro Colón, fue muy emotivo”, expresó Pesatti.
El vicegobernador explicó que la comunidad judía “valora la música como una expresión de perseverancia y resistencia. El pueblo judío atravesó grandes y cruentas tristezas, no obstante, buscó en la música la alegría y la esperanza que lo fortaleció en su identidad”.
“Conociendo esa historia, en ese contexto, el concierto de la novena sinfonía resulta muy simbólico. Beethoven compuso esa obra en absoluto silencio, sin escuchar lo que componía y sólo imaginando el sonido de las notas. En las peores condiciones creó la maravillosa melodía que hoy podemos escuchar, es un símbolo de resistencia”, finalizó Pesatti.
El concierto de la DAIA fue la primera cita de una serie de actividades oficiales a las que Pesatti asistirá en representación del gobierno rionegrino en Capital Fedral.
La Sinfonía Nº 9 en re menor, op. 125, conocida también como “Coral”, es la última sinfonía completa del compositor alemán Ludwig van Beethoven. Es una de las obras más trascendentales, importantes y populares de la música y el arte. Su último movimiento es un final coral sorprendentemente inusual en su época que se ha convertido en símbolo de la libertad. Precisamente, una adaptación de la sinfonía, realizada por Herbert von Karajan es, desde 1972, el himno de la Unión Europea (UE). En 2001, la partitura original de la sinfonía se inscribió en el Registro de la Memoria del Mundo de la UNESCO, donde forma parte, junto con otros sobresalientes monumentos, de la herencia espiritual de la humanidad.
El concierto tuvo como protagonistas a la orquesta “La Filarmóni@a”, dirigida por el maestro Carlos Vieu, el coro “Lagun Onak”, bajo la dirección de Miguel Angel Pesce y los solistas Paula Almerares, soprano; Alejandra Malvino, mezzo soprano; Enrique Folger, tenor y Hernán Iturralde, barítono.

22 octubre 2019
Interés General