La medida la resolvieron luego de que durante la mañana mantuvieran una caldeada reunión con concejales y funcionarios del área de Tierras de la municipalidad, a quienes les habían solicitado tiempo atrás el acceso a parcelas fiscales para construir sus viviendas.
En el encuentro, el titular de la Secretaría, Alfredo Andreoli, les explicó que no hay tierra en condiciones de ser entregada, dado que la disponible no cuenta con los servicios básicos, luz, gas y electricidad.
El funcionario además les aclaró que deben cumplir con los requisitos que impone la ordenanza respectiva, que determina para la adjudicación un sistema de calificación que suma puntos por años de residencia en la localidad.
La respuesta no los conformó, pues en su mayoría los demandantes son matrimonios jóvenes con hijos, por lo que con ese esquema deberían esperar los que aparecen con mayor antigüedad, y hay gente de 65 en años en espera.
Protestaron. Aseguraron que hay privilegiados que recibieron lotes. Mencionaron que dos corralones de construcción -uno vinculado a una funcionaria- recibieron terrenos a cambio de materiales.
Se retiraron molestos del recinto del Concejo Deliberante, y en la misma vereda de la municipalidad se pusieron de acuerdo para iniciar la ocupación.
Poco después del mediodía y ante un intenso calor desmalezaron una porción del terreno e instalaron carpas y lonas sostenidos con postes y puntales.
Lo reclamó la UNTER
En plena tarea de asentamiento recibieron la visita de dirigentes de la UNTER, quienes les comunicaron que esa manzana les pertenece.
Santiago Romero, secretario general local del gremio, les anticipó que deberá presentar una denuncia.
El diálogo fue cordial. Aunque le aclararon a un docente de apellido Vilalta, que es hijo de Norma Salinas, quien estuvo a cargo del área de Tierras durante la gestión del intendente Iud, que el terreno tiene una reserva para el sindicato, y no ha sido loteado aún.
Todo quedó registrado en un video que grabaron con un celular.
Posteriormente llegó una patrulla de policía, cuyos efectivos pidieron la identidad de cada uno de los ocupantes.
Según subrayaron, no se irán hasta tanto no les otorguen otro lugar donde construir sus casas.
Afirmaron que están dispuestos a soportar los días que sean necesarios.
De hecho estaban reforzando las precarias instalaciones que montaron.
Algunos vecinos se acercaron para prestar colaboración, sobre todo porque hay varios chiquitos y el calor era intenso. Recibieron botellas de agua y hielo.
Reiteraron que no quieren que les regalen los terrenos, sino pagarlos.
Como resaltaron en la reunión en el municipio, los alquileres son cada vez más caros, sobre todo en temporada turística, que aumentan considerablemente.
FUENTE: El Mallín
22 octubre 2019
Interés General