Playas Doradas es el balneario emergente de mayor pujanza
en los últimos años en Río Negro, que con su propuesta de naturaleza y relax
busca integrar un corredor turístico con destinos consolidados como Puerto
Madryn y Las Grutas, con el impulso que prometen un parque nacional sobre su
límite norte y la futura planta de hidrógeno verde al sur.
La villa dista unos 25 kilómetros de la Ruta Nacional 3 y
Sierra Grande -municipio al que pertenece- es por la ruta provincial 5, en
parte aún de ripio, que culmina en la costanera frente a la amplia franja de
playa que se extiende desde el puerto de Punta Colorada hasta la desembocadura
del arroyo Salado.
La playa, con una extensión total de 13 kilómetros,
continúa tras ese curso de agua que marca el límite con el recientemente creado
Parque Nacional Islote Lobos, hasta perderse de la vista junto a Punta Sierra y
los primeros promontorios marinos que dan el nombre a la reserva.
El casco urbano, mayormente volcado sobre la avenida
costanera, incluye las viviendas de los aproximadamente 350 habitantes
estables, además de varios mercados y otros comercios, como bares y restoranes
que ofrecen la especialidad del pulpito patagónico, entre otros platos locales
y tradicionales.
La pujanza se observa en la gran cantidad de sitios de
hospedaje en construcción, además de los complejos de departamentos y cabañas
para alquiler que suman unas 2.000 camas turísticas, entre ellos la Posada de
la Luna, el primer edificio de este tipo del lugar, que se destaca en un
promontorio sobre la playa con su diseño en forma de barco.
Nacida como Balneario El Salado, en 1986 fue rebautizada
como Playas Doradas, un nombre que puede parecer presuntuoso pese a sus arenas
claras y limpias, barridas por el viento patagónico, pero que se entiende
cuando el sol cae sobre la estepa y genera brillos y tonalidades cambiantes en
la playa húmeda, entre los que prevalece el dorado.
La nueva tendencia turística generada por la pandemia de
coronavirus, con eje en la naturaleza y espacios abiertos de aire puro,
benefició a este destino con una gran afluencia de visitantes desde la
reapertura de la actividad, atraídos por el sol, la playa y la tranquilidad de
la apacible villa. Esa demanda movilizó la economía y llevó a duplicar su
capacidad de hospedaje en un año -en la temporada anterior eran unas 1.000- que
estuvo colmada durante casi toda la temporada estival y mantiene buen promedio
en el inicio de la época fría, con perspectivas de lleno total en Semana Santa.
Respecto de las propuestas que exceden lo veraniego, el
intendente de Sierra Grande, Renzo Tamburrini, dijo a que Télam que este
municipio es "el único lugar que en lo turístico une la costa con sierras
de altura, donde se pueden practicar deportes como rappel, tirolesa, escalada
deportiva y boulder (escalar rocas)".
"Hay un desarrollo de paredes que ya están incluidas
en el vademécum de paredes nacional para realizar la escalada, que lo
desarrollamos nosotros", contó, y comentó que al estar "toda la
potencialidad muy incipiente, ya he atendido a tres operadoras que empezaron a
evaluar la posibilidad de inversión".
Sobre Playas Doradas, Tamburrini explicó que antes,
"fuera de la estación veraniega no podíamos competir porque el gas era muy
caro, pero se hizo la planta de represurización y el anillado general y muchas
cuadras que ya se empiezan a ramificar para darle acceso a los vecinos y los
complejos turísticos".
También mencionó "la obra de cloacas, que fue
inaugurada en diciembre del año pasado, y el acceso (Ruta 5) que fue hecho y
financiado por Vialidad Nacional, que falta muy poco para terminar".
El secretario de Turismo de Sierra Grande, José María
Clemant, quien asumió recientemente, dijo a esta agencia que "este es un
lugar muy chico, con una playa muy extensa", con dos de sus 13 kilómetros
habilitados para bañistas, con servicios de guardavidas, y el resto ideal para
caminatas y otras actividades.
Sobre el perfil de los turistas, detalló que "desde
mediados de diciembre y todo enero llega un turismo más joven, y hace muy
poquito empezó a haber actividades nocturnas para los chicos, pero usualmente
es un turismo de gente más grande, que viene más a descansar, a compartir
caminatas, todo lo contrario a lo que se puede ver en Las Grutas".
"En esta temporada de verano, que fue muy particular
con récord de visitantes, la mayor cantidad vino de la provincia de Buenos
Aires y del sur, como Comodoro Rivadavia, Trelew, Esquel, Tierra del
Fuego", precisó, y destacó que "es una de las playas patagónicas con
aguas mucho más cálidas que lo que están acostumbrados".
Por otra parte, mencionó que cuentan con "algunas
potencialidades muy interesantes, como son la llegada de Parques (Nacionales) y
el cóndor, que es un producto que va a potenciar muchísimo nuestro destino más
allá del sol, la playa y la arena".
Al respecto, agregó que "en el último censo de la
Nasa sobre avistaje de cóndores, pudo detectar que el cóndor está volviendo al
mar y para nosotros es sumamente importante, porque se lo ubicó precisamente en
este sitio de Parques Nacionales y es un atractivo muy fuerte", porque
"este producto no se da ni en Puerto Madryn ni en Las Grutas".

13 diciembre 2025
Río Negro