El gobernador Daniel Scioli sigue al frente en el ranking de imagen de los políticos del país, y el dato en si mismo ya disparó algunas internas en la cima del poder.
     Es que en algunos despachos de la Casa Rosada se reconoce que el embate del cristinismo de paladar negro contra el mandatario provincial, cuya cabeza visible es el vicegobernador Gabriel Mariotto, podría convertirse en bumerang, en el marco de la estrategia para eliminar al gobernador bonaerense de la lista de candidatos a la sucesión presidencial en 2015.
     Al menos dos secretarios de Estado y un analista por excelencia del gobierno con despachos en Balcarce 50 reconocen que atacar a Scioli de la manera en que lo viene haciendo Mariotto, aunque también dirigentes de La Cámpora que en la Provincia tienen como principal referente al diputado José Ottavis, ha sido contraproducente entre los votantes de la Provincia.
     Se daría, según esos estrategas, un caso parecido a lo que ha ocurrido con los ataques contra el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri: su imagen creció en los sondeos de imagen recogidos en la Ciudad Autónoma cada vez que el alcalde fue víctima de la munición gruesa que le dispararon la presidente o sus principales voceros mediáticos.

Se despega
     Los últimos trabajos de campo que llegaron a los despachos del cristinismo confirmaron una tendencia que se venía afirmando: el gobernador es hoy el dirigente político con mejor imagen positiva del país, y hasta en algunos de esos trabajos amplió en algunos puntos la brecha que lo separa de la jefa de Estado.

FUENTE: Eugenio Paillet/"La Nueva Provincia"