El matutino señala:

El gobierno de Río Negro vive su crisis institucional más grave desde que Alberto Weretilneck asumió en reemplazo de Carlos Soria, muerto a manos de su propia esposa el 1 de enero de este año. Esta semana salieron a relucir las diferencias de conducción que existieron desde un principio entre Weretilneck, vice gobernador de Soria y miembro del Frente Grande, y el senador nacional por el PJ Miguel Pichetto, hombre fuerte del peronismo en la provincia. A tal extremo llegó el conflicto que desde algunas fracciones del PJ rionegrino ya están exigiendo la renuncia de Weretilneck y un llamado a nuevas elecciones.

El PJ de Bariloche distribuyó una declaración donde le advierte a Weretilneck que “si no esta dispuesto a respetar la palabra empeñada al pueblo, convoque a elecciones para gobernador , para que la sociedad legitime a su representante”. Por su parte, el destacado dirigente justicialista de General Roca, Rodolfo Ponce de León, aseguró que “ hay que convocar al pueblo nuevamente , decirle que nos pasó esta fatalidad, que la oportunidad que nos dieron entonces la renueven”.

La discrepancia está en lo que llaman “conducción personalista” de Weretilneck y el nivel de gasto. Esta semana mientras Weretilneck insistía en que los funcionarios deben tener ingresos más altos y en que recuperará el plus de zona desfavorable para los estatales, Pichetto abogaba por hacer todo lo contrario en ambas materias.

Ayer, Weretilneck aseguró a que no había crisis en el gobierno. Pero Pichetto no dudó en revelar que la crisis institucional es real e ineludible. Para los legisladores que forman filas en el FPV el tema de fondo es que Weretilneck dejó de lado el pacto de gobernabilidad sellado a principio de año con el PJ. “El poder que tiene es prestado, heredado”, dijo al Río Negro el legislador por el PJ Ariel Rivero.

Los peronistas que por décadas vieron cómo la UCR repetía gobiernos hasta la asunción de Soria, están convencidos de que la solución es la salida de Weretilneck. “Pichetto tiene que mostrar valentía y convertirse en gobernador”, dice a Clarín un curtido dirigente peronista de General Roca.

“No hay ningún deseo por parte del partido de generar un conflicto. Sí es cierto que hemos detectado una conducción muy personalista, sentimos que no hemos sido escuchados cuando fuimos a emitir nuestras opinión, yo mismo lo viví, y creemos también que llegó la hora de hacer público este debate que hasta ahora se había mantenido en privado ”, le dijo Pichetto a Clarín.

Para el senador K, las acciones de Weretilneck podrían afectar las finanzas de la provincia. “Río Negro ha sido muy beneficiado por la ayuda de la Nación”, desliza, dejando en claro que es el PJ quien consigue el dinero en la provincia.

Por si faltaran precisiones, el viernes Pichetto firmó un documento donde asegura, refiriéndose a Weretilneck, que “la mayoría del peronismo visualiza actitudes y conductas oportunistas y coyunturales que consagran un estilo superficial de hacer política”.