Una nueva resolución generó rechazo en docentes y estudiantes

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La directora de Educación Técnica Profesional, Eliana Silva, detalló en una entrevista los recientes cambios normativos que afectan la evaluación, acreditación y promoción de los estudiantes en las escuelas técnicas provinciales. La nueva resolución establece un enfoque renovado en el proceso de enseñanza y aprendizaje, con un énfasis en el desarrollo de capacidades profesionales específicas en cada especialidad.

Según Silva, la normativa introduce una evaluación formativa basada en el progreso y el desarrollo de las capacidades profesionales de los estudiantes. “Nuestro objetivo es asegurar que los estudiantes de las escuelas técnicas no solo adquieran conocimientos teóricos, sino que también desarrollen habilidades prácticas relacionadas con los perfiles profesionales de sus respectivas especialidades, como en los casos de electricidad o construcción”, explicó.

Una de las novedades más destacadas de esta normativa es la implementación de dos instancias de evaluación. La primera, a nivel bimestral, busca informar a las familias sobre el progreso de los estudiantes a través de notas cualitativas que reflejan si el estudiante ha construido las competencias necesarias o no. “Este sistema está diseñado para mantener informadas a las familias sobre el desarrollo de sus hijos en el proceso educativo”, agregó Silva.

Por otro lado, en el término de cada cuatrimestre, las calificaciones se vuelven numéricas, lo que permitirá a los estudiantes contar con una evaluación cuantificable que luego será parte de su analítico académico. “Estas calificaciones numéricas se reflejarán en el título de los estudiantes, especificando los diferentes talleres realizados durante su formación”, detalló la directora. En este sentido, se subraya que los títulos profesionales que otorgan las escuelas técnicas provinciales incluirán, además de las calificaciones, una descripción de las prácticas realizadas en cada uno de los talleres.

Otro aspecto importante abordado por la normativa es la asistencia. A partir de ahora, se establece un porcentaje mínimo de asistencia obligatoria del 75%, un requerimiento necesario debido a las habilitaciones profesionales que dependen de la formación práctica. “La asistencia es crucial, especialmente en los talleres, donde los estudiantes deben contar con la práctica suficiente para poder ejercer sus profesiones. Esta nueva normativa busca garantizar que todos los estudiantes adquieran las competencias necesarias”, señaló Silva.

En cuanto al concepto de repitencia, la directora indicó que este se reemplaza por el término “permanencia”. De acuerdo con la normativa, un estudiante podrá permanecer en el mismo año con la aprobación de hasta tres espacios curriculares. “El objetivo es que, en lugar de repetir el año completo, los estudiantes puedan continuar su formación mientras fortalecen aquellas áreas en las que no han alcanzado el nivel esperado”, explicó.

Silva también mencionó el impacto de los cambios en el diseño curricular de las escuelas técnicas, el cual abarca seis años de formación y 7000 horas reloj. Estas horas están distribuidas en un plan de estudios que tiene validez provincial y nacional, y que no se ve afectado por la nueva normativa. “El diseño curricular sigue siendo el mismo, lo que cambia es la manera en que evaluamos y acreditamos los logros de los estudiantes durante su trayecto formativo”, aseguró.

La directora destacó, además, que uno de los principales retos es lograr que los docentes adapten su enseñanza a un modelo más personalizado, dado que los estudiantes no siempre aprenden al mismo ritmo. “El docente tiene la responsabilidad de focalizar su enseñanza y mejorar el proceso de aprendizaje, ya que cada estudiante tiene un ritmo diferente. Debemos garantizar que todos nuestros chicos y chicas desarrollen las capacidades profesionales necesarias para su futura habilitación”, finalizó Silva.

Con estos cambios, las autoridades educativas provinciales buscan mejorar la formación y la empleabilidad de los egresados de las escuelas técnicas, asegurando que la titulación que obtienen sea precisa y refleje de manera clara su preparación profesional.