La generación de hidrógeno verde en Río Negro está cada
vez más cerca de ser una realidad concreta. Más allá de las posiciones de
Estados Unidos y algunos otros industrializados sobre la emisión de gases,
comienza a haber un consenso para generar una conciencia ecológica, con
energías renovables y proyectos de desarrollo sustentable del mundo.
Así al menos se perfila lo que parece va a llamarse
Consenso de Glasgow, por la histórica reunión que se lleva a cabo en la ciudad
escocesa y que se extenderá hasta el próximo 16.
Lo ocurrido en Glasgow repercutió directamente en Río
Negro, pues el acuerdo entre el gobierno argentino y la empresa australiana
Fortescue Industries establece una inversión superior a los 8 mil millones de
dólares desde el inicio del proyecto hasta 2028. Falta un montón, como
acondicionar el lugar donde estará la planta, medir la real intensidad del
viento, capacitar a personal (el proyecto habla de 15 mil empleos directos),
entre otros aspectos, pero al mismo tiempo no falta nada. Así lo dicen en
Glasgow, que la oportunidad de salvar al planeta requiere de intervenir
rápidamente.
Esta semana el Gobierno provincial y el Gobierno
nacional y los adláteres de cada uno de
ellos salió a ponderar el acuerdo y reivindicarlo como logro propio ya desde un
plano más bien partidario, aprovechando el proceso eleccionario que está en
plenitud. Así, Juntos Somos Río Negro y el Frente de Todos festejaron por su
cuenta el acuerdo con la australiana Fortescue.
Si bien más allá de cualquier festejo absolutamente
válido, hay una figura en todo esto que no debe de quedar en segundo plano
porque fue la primera que introdujo la cuestión ecológica en la gestión de
Gobierno y la que habló de la necesidad de generar recursos sustentables: la
gobernadora Arabela Carreras.
Carreras comenzó su gestión en diciembre de 2019 con un
contexto económico complicado a nivel nacional. Pero en su discurso de
asunción, la flamante gobernadora de la Provincia anunció la creación de un
área destinada a observar los efectos del Cambio Climático en la provincia y
promover acciones de mitigación "acordes a las premisas
internacionales".
Además profundizó esa premisa puertas adentro de la
gestión provincial al ordenar una optimización de recursos energéticos,
impulsar un proceso de despapelización y que el funcionamiento sea en pos de
los cuidados de recursos teniendo en cuenta que se hacen con energías no
renovables.
Esa posición le valió a Carreras ser blanco de críticas
tanto propias, cuando atravesó una fuerte disputa interna con el ex gobernador
y presidente del partido, Alberto Weretilneck, como de parte de la oposición
que le reclamaba otras prioridades en la gestión.
Con el acuerdo sellado por el Presidente Fernández en
Escocia y que significa la mayor inversión extranjera en el país en los últimos
años, se pondera aquella determinación de Carreras de que su Gobierno iba a ir
por esa línea y que además sostuvo esa idea, cosa que no pasó cuando quedó
trunco aquel acuerdo supuestamente millonario y beneficioso para Río Negro que
alentó el entonces gobernador Miguel Saiz con una provincia de la República
Popular China.
Aquello que le criticaron, que la cuestión verde no era
un tema prioritario termina ahora por fortalecer a Arabela Carreras y la pone
con ventaja de cara a las elecciones de 2023, para las que falta un montón,
pero en realidad no falta nada… como con el cambio climático.
23 febrero 2024
Palabra de Domingo