El primer paso que deben dar, es admitir que el Estado, está muy lejos del alcance de nuestros niños, niñas y adolescentes. Para esto, la solución no es bajar la edad de punibilidad contravencional, buscando ingresar en un régimen punitivo y represivo a nuestros jóvenes. Piensen primero en implementar políticas que los incluyan y los contengan, que comprendan las problemáticas en las que se ven envueltos todos los adolescentes, y sobre todo aquellos a los cuales el gobierno no puede ni quiere dar respuetas, ya que tanto la falta de voluntad, la falta de coherencia ideológica y la desidia política, no hacen otra cosa que violentar a los ciudadanos. No pueden pretender que no haya jóvenes cumpliendo al pie de la letra todas las normas de convivencia, cuando tenemos un gobierno y una legislatura que no hacen otra cosa que romper con la armonía social, con una permanente falta de respeto hacia las instituciones y la comunidad toda. La violencia política e institucional que reside en la falta de respuesta, es de una perversidad absoluta, cuando quien debiera cuidar de nuestros jóvenes, no hace otra cosa que querer castigarlos, intentando suplir así las propias falencias.
Esta situación, además de provocarme dolor como rionegrino, me produce vergüenza como militante y defensor de todos los niños, niñas y adolescentes en situación de calle y vulnerabilidad social. Que un grupo de legisladores y el Ministro de Seguridad de la provincia ponderen el ingreso de los jóvenes en el régmien punitivo y represivo, cuando debieran buscar soluciones tendientes a que formen parte del Sistema Proteccional, haciendo hincapié en la educación, y la conternción comunitaria, es un severo retroceso institucional y político.
Pareciera que adhieren al dogma de la Prevención General Negativa, que busca contentar a la sociedad cobrando venganza del sujeto acusado de cometer un delito, o en este caso, una contravención. Me ponen en posición de recordarle a los legisladores y al Ministro Albrieu, que esto no se contempla dogmáticamente en los actuales Estados de Derecho. Acaso desconocen los alcances de la Convención Internacional de los Derechos del Niño, la Ley Nacional 26061 y la Ley Provincial 4109. Mi recomendación es que estudien un poco, y sobre todo que entren en contacto con la sociedad y los adolescentes a los cuales ustedes buscan castigar, quizás hallen formas más coherentes y comprensivas de abordar la problemática. Contamos con instituciones como el Consejo de los Derechos del Niño, áreas específicas del Poder Ejecutivo y ciudadanos, que deben sentarse a articular de manera inmediata, para promover la protección de los niños, niñas y adolescentes rionegrinos. Nuestro objetivo debe ser el de que aquellos jóvenes que incurren tanto en contravenciones como en delitos del fuero penal, ingresen en el Sistema Proteccional, para que podamos promover un cambio en su conducta a través de la educación, en pos de su reinserción social. Está en su naturaleza trasgredir las normas establecidas, porque se encuentran en un momento en que la violencia, los delitos y contravenciones, se traducen en un pedido a gritos de contención por parte de los adultos y el Estado.
Nuestros jóvenes no solo adolecen del momento psicológico, social y evolutivo en el que se encuentran, pareciera que son culpables de adolecer la falta de formación y compromiso social de quienes debieran abogar por la correcta implementación de las políticas públicas y su alcance.
Articulemos entre todos los organismos oficiales, las organizaciones de la sociedad civil, los efectores comunitarios, y sobre todo.. con, por y para los chicos! Infundemos esperanza de cambio, y posibilidad de proyección a futuro, en vez de castigar a los jóvenes porque no logramos comprenderlos. Mi pedido más profundo, es no criminalizar la adolescencia.
Lic. Gastón Gutiérrez
gaston_viedma@hotmail.com
DNI 33530615
* Psicólogo y Docente de la Universidad del Salvador
14 enero 2017
Cartas de Lectores