A tres semanas de las PASO, los partidos recorren el camino
diseñado. JSRN, con un ojo en el proceso electoral y el otro en la economía, se
desentiende del resto de la administración. EL FPV amaga con salir del encierro
del pequeño círculo familiar. Poco a poco se develan los elevados costos del
endeudamiento.
Rumbo a las Primarias, el oficialismo realizó un acto en
Viedma para presentar al candidato Fabián Gatti. La convocatoria se hizo con
pocas horas de anticipación, vía mensaje telefónico. Dejó muy poco saldo,
apenas sirvió para recordar a 200 funcionarios que “estamos de campaña”. No
hubo entusiasmo en los oradores ni en la mayoría de los asistentes. En el
cierre de los discursos, Weretilneck se ocupó de realzar la lista. Cuando nombró
a la segunda postulante solo atinó a decir que es la hija del creador del Instituto
Balseiro. Poco atributo, demasiada sinceridad.
Un sabor amargo quedó adentro de la fuerza. El encuentro se
llevó a cabo en el Salón del sindicato de los judiciales. Pablo Barreno, el
titular del gremio, está enrolado en el justicialismo. Pocos días antes, en ese
mismo recinto, se habían congregado los dos principales adversarios que tiene
el gobierno en esta etapa: la Asamblea No Nuclear de Viedma y la aspirante a
renovar su banca en la Cámara Baja nacional, María Emilia Soria. La diputada
sorprendió a los presentes cuando se sumó al debate por la instalación de la
Central destinada a producir energía eléctrica. El propio secretario general de
Sitrajur se había ocupado de invitar a la roquense.
El responsable de campaña del Circuito Valle Inferior,
Matias Rulli, quedó averiado. La escasa convocatoria, el error en la selección
del lugar y su osadía para intentar posicionarse como uno de los referentes en
la capital provincial, lo dejaron mal parado. Para JSRN ese nicho está ocupado.
Las figuras de Pedro Pesatti, fundamentalmente, y del legislador Facundo López,
en segundo orden, dejan sin chances de cartel al resto de los actores. El
vicegobernador fue la pieza primordial para que el ex concejal logre el
desembarco en el Gobierno. Ahora Rulli optó por desconocer a su mentor. Ante
críticas al Secretario General, nunca se efectuó el recambio por respeto al
presidente de la Legislatura. Tampoco se concretará en el transcurso de esta
batalla.
En lo estrictamente político el oficialismo empezó a mostrar
un cambio en lo discursivo. Weretilneck inició su despegue de Mauricio Macri,
criticando la situación actual. El altísimo rechazo de la figura del Presidente
no le dejó opción. Además, el arco opositor lo saturó vinculándolo con
Cambiemos. Reedita la misma estrategia que en el 2015, cuando fustigó a
Cristina Kirhcner por el descuento de 30 millones de pesos de la
coparticipación, e instaló “la defensa de los rionegrinos”. Este caso es
distinto dado que a Macri le quedan dos años para culminar su mandato, tomará
debida nota de cómo lo traten los gobernadores en esta compulsa intermedia.
Sin ir más lejos, Río Negro aún tiene que pasar por el tamiz
de Nación para obtener la autorización que le permita salir al mercado
financiero internacional por el Plan Castello. La colocación de este bono a
largo plazo le urge al Gobierno para poder transitar un 2018 con votación a
convencionales constituyentes incluida. La puerta de entrada al intento re-reeleccionista.
En Juntos se cuidan de no expresarlo públicamente, pero si no ocurre una
catástrofe, ya proyectan un horizonte con 6 o 7 elecciones hasta octubre de
2019 cuando se elijan 3 diputados y los 3 senadores nacionales, si bien es
cierto que falta un siglo en tiempos tan dinámicos. Queda claro que, a la falta
de planificación en gestión, Weretineck la suplanta con su anticipada estrategia
electoral, siempre guardada bajo siete llaves.
La economía desvela a los responsables de la administración.
El Gobernador impartió la orden de
abonar el cronograma del mes de agosto antes del día 13. Todos los días le
rezan plegarias al goteo de coparticipación nacional. Lo que se recauda en Río
Negro no mueve el amperímetro de las finanzas. Hacienda aún tiene la
posibilidad de emitir bonos por 1.200 millones para completar los 3.000
millones de pesos autorizados. En teoría, esa partida está reservada a las
futuras cancelaciones de obligaciones.
La retracción de la economía del país está haciendo estragos
en las provincias. La proyección que entregó el ministro Kremer, a través de la
resolución 442, deja al descubierto el elevado costo que tiene esta modalidad de financiamiento. La provincia
deberá abonar 287 millones de pesos en intereses para la cancelación de las
Letras que comenzó a emitir hace poco más de un año. Lo hará con los recursos
que incorporó con los “Bonos Cortos”, por los cuales dentro de 3 años deberá pagar
nuevas utilidades por este canje de deuda. No hace falta caer en el paralelismo
sobre la cantidad de escuelas o equipamiento hospitalario que se podrían
generar con esos recursos, para darse cuenta que la cifra es muy onerosa. Entramos
en la bicicleta del endeudamiento. Nada más alejado de un círculo virtuoso.
Este escenario en el medio de dos elecciones es el principal
obstáculo que tiene JSRN. Teme que los votantes emparenten su gestión con la
nacional. La cesación de pagos a los prestadores del Ipross se reeditará esta
semana con la consecuente amenaza de corte de servicio. El Ministerio de Obras
Públicas no puede cancelar ni la mínima refacción a los empresarios de la
construcción. El IPPV aún no realizó la certificación de obras por los 230
millones de pesos que le envió Nación en enero de este año, para el avance de
las viviendas que se construían en el marco del desaparecido Plan Techo Digno.
Esas 2.500 casas inconclusas, a esta altura, representan la historia de la
demora.
Por el lado del Frente para Victoria, un entusiasmado Martin
Soria levantó el cepo y comenzó a dialogar con algunos jefes comunales del PJ.
Les cuenta que su hermana está arriba en las encuestas. Por ahora, los
contactos son telefónicos. Los intendentes aún lo miran con recelo por el
retraso en las relaciones. La candidata recorrió este fin de semana la Línea Sur,
junto a Ramón Chiocconi y Ayelen Spósito, región que, en principio, aparece
como adversa, ya que a sus parajes sólo llega el brazo del Estado. El sábado
terminó su raid en Sierra Grande, donde la esperaban para una cena con
militantes. Mientras, la población atiende sus problemas cotidianos sin
avizorar la elección.
23 febrero 2024
Palabra de Domingo