Pasó la semana con mayores derivaciones para la política
rionegrina de los últimos años. El viernes antes del mediodía la Corte Suprema
le puso fin al intento re reeleccionista del Gobernador. Luego de intensas reuniones del “albertismo”,
se blanqueó la nueva fórmula de JSRN. Cuando Pesatti llegó al alto valle estaba
todo resuelto, ahora vendrán las correspondientes divisiones. Acabada la
disputa judicial las fuerzas se abocan a seducir votantes.
Para el viernes Weretilneck había previsto un raid por el
circuito Alto Valle Oeste, su electorado predilecto. A media mañana recibió la
trágica noticia. Ya no será el 1 en Río Negro. Tres de los cinco miembros de la
Corte derrumbaron su candidatura. El voto
de Ricardo Lorenzetti se plegó a los de Juan Carlos Maqueda y Horacio Rosatti para
aniquilar la postulación.
JSRN por lo bajo valora la tarea del macrismo. Nunca se
animaron a reconocer el dialogo con el Gobierno Nacional por la cuestión
judicial. Tanto Carlos Rosenkrantz como Elena Highton de Nolasco, con distintos
fundamentos, dejaban correr la carrera al líder. La desconfianza se instaló
contra Miguel Pichetto quien debía aportar novedades del otro voto necesario.
Consumado el rechazo, en el primer tramo de la reunión
realizada por la tarde en el CFI de Cipolletti discutían si el senador
traicionó o no tenía el margen de maniobra tantas veces pregonado. Cualquiera de
los motivos había ultrajado la ilusión. En represalia surgió la propuesta de
Weretilneck candidato a la Cámara Alta en las primarias. Cualquier acuerdo previo
cayó en saco roto con la exclusión de la contienda provincial.
Al percatar la falta de acuerdo en ese sentido el mandatario
pospuso esa faena para más adelante. La urgencia obligaba a conformar la nueva
fórmula. Desde Viedma Pesatti adelantó su intención vía redes sociales. El círculo
de confianza fue expeditivo y en la sede del CFI comenzó la danza de nombres
antes que Carreras arribará desde Bariloche. El vicegobernador recién se sumó
por la tarde noche en Fernández Oro, una muestra más de su final despojo.
El juego de encastres instaló rápidamente a Carreras en el
primer lugar. “Arabela se la jugó y es manejable, además muchachos si a mí me
pasaba algo quedaba ella” reiteró el mandatario. La “geopolítica” ubicó a
Palmieri como aspirante a vice. Las dos ciudades más pobladas de la provincia están
representadas dando por tierra con el slogan “cada rionegrino vale lo mismo”.
Por el tamiz ya habían pasado Fabián Zgaib, Elbi Cides y el
propio Palmieri como acompañante de la barilochense. Pesatti nunca estuvo en
los planes “por kirchnerista muleto, el electorado si elige esa opción irá con Martín
Soria”, ese fue uno de los principales argumentos en su contra. Por la noche en
un quincho frente a la estación de trenes cipoleña, el viedmense descargó su ira
profiriendo insultos al círculo de confianza, la humillación ya estaba
consumada.
Martín Soria celebró “la victoria de la Constitución” en un
multitudinario acto organizado por Rubén Belich en Allen. Uno de los
principales aliados ofrendó el marco ideal con unos 20 gremios nucleados en
torno al pope del FPV. Junto al candidato y el mandamás de Camioneros estaba
Juan Carlos Scalesi, el titular de UPCN lo vivió como una victoria personal.
Soria había anticipado el rechazo del descabellado plan al
comienzo del debate judicial. Con crudeza corroboró el incansable esfuerzo de
Pichetto para perjudicarlo. Reafirmó su puntería al dejarlo afuera del PJ
rionegrino porque “trabaja desde hace años para Macri”. Ahora promete cambiar el
chip a modo propositivo. Intentará enamorar al electorado indeciso haciendo
gala de su capacidad de gestión junto a la laboriosidad de su compañera de
lista.
Pondrá en la palestra la comparación de su eficiente gestión
en General Roca, con cuidado de los recursos y obras en marcha; contrapuesta a la provincial con elevado endeudamiento
en dólares. Eso para una porción del electorado. Para la inmensa mayoría solo
expresará la batalla contra los aliados del macrismo.
Al FPV el desgaste judicial le impuso la inmediatez de la
elección. El grueso de la población aún no sabe que en dos semanas deberá concurrir
a las urnas. Parten de una certeza, el apellido Soria es conocido por un altísimo
porcentaje, sus adversarios prácticamente son ignorados. Se pondrá a prueba el
traslado de votos o la fidelidad a los colores más allá de las letras impresas.
Matzen confiaba en “el acierto de defender la Constitución”
mientras los “radicales pragmáticos” se pintaban de verde. Su estrategia inicial descansaba en la convicción de
la vuelta al redil de los votantes boinas blancas tras la exclusión del jefe de
JSRN. Hasta aquí ha realizado su trajín en descarnada soledad. Aspira a superar
los dos dígitos el 7 abril. Los efectos del fallo se expondrán con crudeza en
pocos días.
23 febrero 2024
Palabra de Domingo