Tiempo de estricta restricción. Transitamos un sábado y domingo con disposiciones nacionales, que son la antesala a la extensión de las medidas adoptadas en la Provincia durante toda la semana pasada y en la que, fundamentalmente, se restringe la circulación después de las 20 y se dictan clases por Zoom salvo Bariloche y otras localidades de la Línea Sur, donde sí son presenciales.

Después de que el coronavirus tuvo a maltraer a los rionegrinos y particularmente a los viedmenses con altísimas cantidades de casos y muertos, la situación parece dar una tregua. Según la vocera del Ministerio de Salud, Mercedes Iberó, la curva de la segunda ola comenzó a descender, pero todavía estamos lejos de lo ideal.

Mientras tanto la vacunación sigue no sin polémica en Viedma. A las personas sin factores de riesgo que recibieron sus dosis hace 10 días sin que nadie hubiera dado ninguna explicación con certidumbre al respecto, se suma una vacunación masiva y sin demasiados requisitos el jueves. Para ese día se había convocado desde el hospital a personas que se percibieran con obesidad, lo hizo primero sin pedir certificado y en una corrección del comunicado se pedía certificado, pero ya era un poco tarde pues mucha gente se había quedado con la primera comunicación. Ese día se presentaron al Fioravanti Ruggeri unas mil personas, de los cuales 920 fueron vacunadas y de las que alrededor de 710 eran de primera dosis.

La contracara fue el sábado, cuando 600 personas que se había inscripto no fueron a vacunarse.

Fuera del contexto del coronavirus, que se lleva prácticamente todas las energías, desde el Gobierno de Carreras estuvieron abocados en resolver la situación de los trabajadores temporarios del turismo estudiantil de Bariloche, que están sin trabajar por la pandemia y reclaman asistencia nacional a través del programa REPRO.

La negociación entre el gremio UTHGRA y los empresarios del turismo llegó a buen puerto a mitad de semana y a partir de allí se dio una negociación con Nación para que habilite cupos del REPRO. Cuando el Gobierno tenía todo más o menos encaminado y la propia Arabela Carreras había intervenido telefónicamente con el gremio, con los empresarios y con el Gobierno nacional un comunicado del senador Alberto Weretilneck afirmaba que él y su par del Frente de Todos, Martín Doñate habían destrabado el conflicto. Este comunicado hizo tambalear la negociación porque las partes creyeron que había una paralela. Recién al otro día hubo claridad pero no fue hasta ayer que se terminaron de confirmar los términos del resultado obtenido.

No fue esta la única negociación que ha tenido lugar en Río Negro. La elección para la sucesión de Adriana Zaratiegui en el Superior Tribunal de Justicia también tiene su tiempo.

En este momento hasta cuando la mayoría dormimos, comemos o, como Mauricio Macri miramos Netflix, hay reuniones, conversaciones, gente sacando cuentas respecto de quién ocupará ese lugar.

Quedó clara esta semana la posición del Colegio de Abogados de Viedma, que le dio su respaldo al ex fiscal de Estado y actual secretario del bloque oficialista de Juntos Somos Río Negro, Sergio Ceci, un profesional de los más expertos en cuanto a leyes en general y de Río Negro en particular sabe.

Ceci es por estas horas el candidato que mejor cae en Laprida 212 e incluso no tiene demasiados cuestionamientos entre la oposición. Es más, de tener oposición la postulación de Ceci no sería extraño que esta pudiera venir del propio seno de Juntos Somos Río Negro.

Por supuesto que las negociaciones continúan a cualquier hora y las opciones de Silvana Mucci, una funcionaria de carrera del Poder Judicial y la vocal del Tribunal de Cuentas, Natalia Faluggi, también podrían ser. Mucci es impulsada por el propio Superior Tribunal de Justicia y quedó tercera en la votación del Colegio de Abogados. Desde hace décadas que la organización colegiada de los letrados viedmenses se desvive por quedar en línea con la voluntad del partido del Gobierno. El Colegio es una organización compleja, pero política; conviven partidos con ideologías y la rosca con el bon vivant. Precisamente, esta última combinación le permitió hace no muchos años obtener un subsidio estatal para la construcción de su nueva sede. Ese Colegio alienta a Ceci.

Pero atención, pues esta última semana el Colegio le puso unas fichas, que le sobraban, a Faluggi –también bien vinculada al Colegio de Abogados- por si la cuestión de paridad de género se convierte en un condicionamiento y que si hubiere que elegir una mujer sea Faluggi y no la candidata del STJ.