Con el segundo mes del año comenzó a moverse el tablero
político rionegrino. El puntapié inicial lo dio el intendente de Bariloche que
pretende sacar de la modorra a JSRN. La campaña sucia se instaló en General
Roca antes de lo esperado. El receso no ha contribuido en la construcción de
certezas dentro de la fuerza gobernante, su líder espera que irrumpa la suerte
de su lado nuevamente.
Gustavo Gennuso se hizo eco de los cuestionamientos de sus
pares alineados en Juntos. Por lo bajo plantean preocupación por la falta de
política y cohesión del novel partido. Agregan que las arcas municipales sufren
los retrasos de la tesorería provincial. Estos datos animaron al barilochense a
proponer un encuentro que le costó confirmar. Al principio pocos avalaban el convite,
finalmente acordaron que la reunión de jefes comunales, concejales y
comisionados de fomento se realizará el próximo día 23. El intendente de
Bariloche no puede abonar salarios sin la asistencia financiera de Nación, en
el aturdimiento de Juntos avizora una oportunidad individual para saltar al
plano provincial. Hace estos movimientos en busca de un destino que la endeblez
de su gestión local le negará de forma contundente.
En el ir y venir para concretar el encuentro el Gobernador
vio un hueco y se coló para ser de la partida. No dejará que el libre albedrío
genere un nuevo océano de reclamos como el que sufrió en carne propia en Viedma después de
las PASO. Con su participación “pateará la pelota hacia delante”, neutralizando
las críticas. Hablará de las bondades del Plan Castello, sin transferir aún a
los municipios los 7 millones de pesos que corresponde a cada uno.
Planteará un escenario electoral con lista de Juntos, con
fecha en el primer semestre alejado de las nacionales. Intentará entusiasmar a
potenciales candidatos que podrían surgir de entre los presentes. A esta
altura, pocos le creen. Temen que “arregle la senaduría y dos o tres lugares en
la lista de legisladores”, abortando así el proyecto provincialista. En ese
escenario los jefes comunales se ven a la deriva. La mayoría ya entendió que jamás
habrá vidriera a la sombra de Weretilneck.
En su fuero íntimo, no abandona la idea de continuar
gobernando Rio Negro. Para ganar tiempo a sus laderos les da señales
contrapuestas, a unos les esboza su aspiración de re reelección, a otros les
manifiesta que llegado el momento trabajará en la sucesión. Mientras, recorre
en soledad la provincia. Viajó solo a Holanda, no coparticipó con nadie la
buena noticia que regaló INVAP. Su personalidad le impide verse fuera del
centro de la escena.
La historia juega contra al cipoleño, el pragmatismo
personalista que profesa instaló una brutal desconfianza que lo acompañará
hasta diciembre de 2019. Muchos recuerdan que se había comprometido con Bautista
Mendioroz a integrar la fórmula si el viedmense ganaba la interna que
finalmente perdió con Cesar Barbeito. A finales de 2010 en el despacho del
senador Pichetto, Weretilneck sentenciaba “si usted es el candidato del FPV lo
acompaño, con Soria no voy”. Elevó el
engaño al status de arte.
A 20 días de asumir como Vicegobernador la fatalidad lo
ubicó en el sillón principal de Laprida y Belgrano. En enero de 2012 solo
contaba con dos intendentes de su sector, Abel Baratti y Liliana Alvarado, de
Cipolletti y Cinco saltos respectivamente. Con ambos término en pésimas
relaciones, contribuyó a sus derrotas. Al parlamento habían arribado Jorge
Barragán y Viviana Pereira que provenían de su gestión municipal. Ninguno pudo
repetir, deambulan en la gestión sin rol político.
Marcelo Mango e Isaías Kremer llegaron al ministerio de
Educación, provenientes de su línea política. El ahora legislador del FPV
llegaba con la chapa de la UNTER, se fue repudiado por “La Celeste”, la línea
del gremio que lo había llevado a la máxima representación de los docentes. Al
ex ministro de Economía lo jubiló por los medios de comunicación luego de 20
años de cultivada lealtad. Así se desprendió del equipo político aquel “dirigente
progresista” que había coronado un acuerdo político con Carlos Soria para
derrotar al anquilosado radicalismo que gobernaba desde el 83 de forma
ininterrumpida.
Todas estas historias fueron vistas en vivo y en directo por
el ala peronista de JSRN. Pedro Pesatti, Ricardo Arroyo, Roxana Fernández,
Sandra Recalt, Marcelino Jerez, Rodolfo Cufré y Miguel Vidal son conscientes
que la liquidación total por fin de temporada se avecina. Tienen diferente peso
específico pero las señales de precaución por precipicio se instalaron en sus
caminos. Weretilneck tiene muy arraigado el pensamiento que ninguno tiene
futuro fuera de su órbita, siempre tentando la suerte.
El vicegobernador detenta la llave de la Legislatura,
paciencia inagotable y una firme convicción: cuando se aferra a una decisión no
vuelve a mirar para atrás. Se puede convertir en la piedra en el zapato si
persiste el destrato. Por ahora no hay atisbo de cambio en el accionar del
mandatario, en Regina acaba de correr de la campaña a Oscar Díaz y Silvia
Morales, los dos parlamentarios oriundos de la localidad. Abril puede plasmar
nuevamente la indiferencia del electorado al proyecto provincial.
La campaña sucia arribó demasiado tiempo antes del tramo
electoral. En General Roca aparecieron carteles con la imagen del intendente
Martín Soria junto al extinto Pablo Escobar. Antes circulo un video con
críticas al titular del PJ que terminaba con la imagen de una bala con fecha
del 2 de febrero. Su entorno leyó esto
como una amenaza de muerte y el líder del FPV radicó una denuncia en un juzgado
federal. Tomará intervención el área de “ciber crimen” judicial para detectar
dónde y cómo surgió dicha publicación en las redes sociales.
Soria se tomó el tema de la intimidación con seriedad por su
familia. En lo político le queda claro que a sus adversarios los ponen
nerviosos los números que arrojan los sondeos. Se abroquela en su estrategia de
mostrar permanente gestión, este fin de semana se abocó a la fiesta de la
Manzana. El calibre de sus espectáculos la ha convertido en un faro para la
provincia. Será opositor del Macrismo y de Juntos vayan unidos o separados. Intentará contener al FPV y los desilusionados
que vayan quedando en el camino, seguirá la senda trazada, no confía en las
carambolas como Weretilneck.
23 febrero 2024
Palabra de Domingo